lunes, 13 de agosto de 2007

Motivo

Por encontrarte me pierdo
y ahora que siento que te pierdo,
no tengo más remedio que encontrarme,
puesto que si de algo vale todavía,
he de encontrarme para ofrecerme
y así de nuevo encontrarte.

Que por qué te perdí?,
no lo sé de cierto,
incluso no sé si te perdí;
pero la sola sospecha
mantiene mi alma intranquila.

Te busco, pero,
para qué?,
si no me buscas.

Pero, qué consuelo?,
si no hablas,
si no callas,
sólo no.

Saberte propio
o por lo menos perdido,
seguro sería más llevadero
que esta sola angustia
de no saber
si aún espero.

2 comentarios:

Erika dijo...

No saber si uno aun espera es desesperante.

Anónimo dijo...

La fortuna de perder algo, abre la puerta para tener conciencia mas clara de lo que aun no se va y lo que se necesita ir, no podemos vivir atados ni siquiera a los recuerdos cuando no construyen un mejor ser...